Cada mayo, la respuesta en el daycare ha sido más y más positiva y proactiva aunque sabemos que tendremos que seguir hablando sobre esto por muchos años más.
Por más insoportable que sean estas conversaciones, sé que mi esposa y yo hemos tenido mucha suerte con este asunto.
Si pensamos sobre nuestros antecesores en el movimiento LGBTQ, es importante recordar que aunque algunos no tienen hijos por decisión propia, otros pensaron que ser padres y madres estaría fuera de su alcance. Ya fuera porque el mundo es demasiado hostil para las personas LGBTQ, porque la tecnología era muy cara o porque las agencias de adopción se negaban a pensar que las personas LGBTQ serían buenos para los niños. Lo triste del caso es que todavía muchos piensan así.
En este Día de las Madres me parece particularmente ofensivo que el Departamento federal de Salud y Servicios Humanos (HHS) haya decidido que no ha va a recolectar datos sobre las necesidades de las personas mayores LGBTQ.
No solo esta exclusión es ofensiva –al igual que borrarnos del censo que se aproxima en 2020– sino que además es una amenaza a la vida de las personas mayores. Cuando no se toma en cuenta las necesidades de las personas más vulnerables al momento de crear políticas, entonces no se ponen recursos a la disposición de las personas que más lo necesitan.
En otras palabras, cuando no se “cuentan” a las personas LGBTQ, entonces no contamos para nada.
Es por eso que en la víspera del Día de las Madres, nuestra abogada Karen Loewy, experta en asuntos de personas mayores, le envió esta carta al Departamento de Salud para llamar atención sobre la exclusión de personas LGBTQ.
Esta carta le da voz a muchos seniors LGBTQ que no tienen niños u otros familiares que puedan alzar la voz por ellos. La carta nos recuerda la importancia de cuidar a las generaciones que nos preceden. Nos recuerda la belleza frase judía l’dor vador: de generación a generación.
Mientras comparto este Día de las madres con mi esposa, su madre y mis dos bellas hijas, tengo mucho por lo que estar agradecida.
Doy gracias por todos aquellos que han logrado crean un mundo en el que yo pueda tener la familia que tengo.
Doy gracias por Lambda Legal, que da la lucha para que nuestro país sea más justo para todas las personas LGBTQ.
Y doy gracias por tantas personas mayores LGBTQ, que aunque no las haya conocido, al vivir una vida íntegra y honesta, han hecho que mi maravillosa vida sea posible.
En honor a su valentía, debemos alzar nuestra voz contra la administración de Trump, la cual trata de borrar a toda persona LGBTQ.
