Nuestro deseo por sentirnos unidos no debe cegarnos
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Debemos empezar por reconocer el dolor que sentimos por la matanza de gente hispana, puertorriqueña, latina y latinoamericana, gente que se identificaba como lesbianas, gays, bisexuales, transgénero o transexual (LGBTT), gente que en ocasiones pasa desapercibida por los medios. La noche del sábado era noche latina en Pulse, un club gay en Orlando, Florida, lugar donde se congregaba una parte de la diversa comunidad latina.
Leemos los nombres de las víctimas y sentimos horror por el impacto de esta tragedia en nuestras comunidades. Por todo el país, las comunidades latinas e hispanas sentimos esta pérdida. Y nuestro deseo por sentirnos unidos no debe cegarnos.
Me ha conmovido hasta las lágrimas leer cómo las víctimas y los sobrevivientes se comunicaron con sus familias. Me ha conmovido ver cómo los medios de comunicación muestran los lazos de amor entre familiares, sobre todo cuando casi nunca vemos estas demostraciones de afecto en los medios. Me hubiera gustado que fuera por otras razones, pero es importante que el mundo vea que nuestras familias y comunidades nos quieren y nos necesitan. Hemos ido descubriendo cómo muchas de las víctimas contribuían de forma económica o emocional a sus familias.
Eran los sueños y la luz de sus familias, los cimientos de amigos y colegas.
Sé que los recursos para apoyar a la gente LGBTT no son suficientes en lo que se refiere a las comunidades latinas e hispanas, particularmente en español y tal vez muchas personas no sepan a dónde ir para buscar ayuda o apoyo. Tomemos en cuenta, por ejemplo, que la comunidad puertorriqueña en Florida se ha más que duplicado desde el año 2000, especialmente Orlando, donde se encuentra la mayoría de puertorriqueños que viven en Florida según el censo (2013).
Aunque hemos tenido éxito, tanto las comunidades LGBTT y las comunidades latinas e hispanas necesitamos continuar trabajando unidos. Necesitamos más recursos para apoyar la aceptación por parte de la familia y para ayudar a las personas a salir del clóset. Necesitamos que las personas LGBTT sean parte de toda política de inmigración. Necesitamos la colaboración entre países. Esta tragedia ilustra la urgencia de todo lo que necesitamos.
Como defensores y educadores, a veces nos enfocamos y exigimos cambiar el rechazo por parte de la familia, o en la cantidad de jóvenes sin hogar, o la violencia que tanto nos afecta. Para aquellos que no nos conocen o no saben de nuestras vidas, estos podrían llegar a definir nuestras vidas, pero esa no es la historia completa de quien somos. Así lo hemos presenciado en las muestras de amor y solidaridad durante estos días.
A la luz de esta tragedia, la comunidad latina e hispana LGBTT sigue en pie de lucha. Conoce más sobre las respuestas de nuestras comunidades, por ejemplo de parte de Familia Trans Queer Liberation Movement y Union=Fuerza. No dudes en buscar ayuda local si está disponible.
